A 10 años de la masacre de Puente Pueyrredón

"Hablamos por los que fueron callados"




Este 26 vamos al Puente, no sólo a homenajear y a recordar. Vamos a levantar las banderas del reclamo que hemos llevado a lo largo de estos diez años, la cárcel a todos los culpables, porque nuestro homenaje será incompleto mientras se mantenga la impunidad.




Tenemos razones para convocarnos: “La lucha por el juicio y castigo a los responsables políticos del asesinato de Maxi y Dario”. A diez años, la Justicia kirchnerista, de la mano del juez Ariel Lijo, ha mandado al archivo la causa contra todos los funcionarios. El gobierno no sólo los recicló en sus filas, también se negó a abrir todos los archivos de la Side y los ha indultado, para evitar su condena.


También ganaremos las calles luchando contra el fallo del tribunal de Lomas de Zamora, que ha otorgado el “beneficio” de traslado de los asesinos Fanchiotti y Acosta a penales de régimen abierto. Con esto han dejado planteada la posibilidad de que obtengan salidas transitorias y su libertad. Los jueces y el Ministerio de Seguridad bonaerense han protegido a estos elementos por ser parte del aparato represivo que tienen a su servicio. Fanchiotti, recordemos, formaba en inteligencia a policías desde el penal de Magdalena, cuando ya estaba condenado; se descubrió que salía a comer asados con el condenado juez Lima, con el aval del Servicio Penitenciario, y para armar su defensa cuenta con todos los recursos legales y técnicos desde dentro de los penales. La condena a perpetua y la exigencia de cárcel común y efectiva es otro motivo de lucha. Porque no tendremos homenajes a nuestros compañeros mientras este régimen de impunidad siga vigente.


Pero también nos movilizan las luchas que recorren a nuestro pueblo. Nos movilizaremos por los 14 compañeros asesinados por luchar. Por los compañeros qom, por Almirón y Ramos (José León Suárez), por Velázquez, Farfán y Reyes en Jujuy; por Carrasco y Cárdenas, en Bariloche; por los compañeros del Indoamericano; por los chicos de la masacre de Rosario; por la aparición con vida de Jorge Julio López y de Luciano Arruga; por los más de 5.000 luchadores procesados por defender sus derechos y los de sus compañeros. Porque el asesino Poblete que, al igual que Fanchiotti, sale del penal amparado por la policía neuquina, pague el crimen contra el compañero Fuentealba; y también lo paguen todos los responsables políticos.


Marcharemos por la condena ya a los asesinos de nuestro compañero Mariano Ferreyra. Que Pedraza y su patota, la policía, la patronal y los funcionarios terminen tras las rejas.


Todos estos motivos; los de los compañeros que han sido asesinados mientras peleaban por reclamos populares que aún siguen sin resolverse: el derecho al trabajo, a la salud, a la educación, al salario; la lucha contra la tercerización, por el salario y contra la burocracia sindical y contra las patronales; por el derecho a la tierra y a la vivienda y contra la impunidad del aparato represivo y mafioso al servicio del delito, de la trata y del narcotráfico. Contra la Ley Antiterrorista y contra el espionaje kirchnerista. Todas estas razones nos unen y nos vuelven a convocar este 26 para ser una sola voz, para levantar las banderas de Maxi y de Darío; las banderas de la juventud luchadora y militante; las de Mariano; las de todos los que no dejaremos pasar tanto atropello y tanta impunidad.


Como un poema escrito por Maximiliano, este 26 estaremos nuevamente sobre el Puente, porque todos nosotros tenemos una cita de lucha, porque “Hablamos por los que fueron callados” y porque su verdadero homenaje será nuestra victoria.




Vanina Kosteki