A mediados de año, la comisión de
educación especial de Ademys denunció el cierre del turno noche de EEE Nº4. En
dicha oportunidad, Tribuna Docente sostuvo que se trataba de un cierre en línea
con el ajuste del Gobierno, que cerró casi 100 grados a principios de año.
Ahora, en un volante firmado por
la supervisora y la conducción de la escuela, se acusa a Ademys de mentir sobre
el cierre. El turno fue efectivamente cerrado pero, se sostiene, con el aval
del conjunto de la comunidad educativa y para favorecer las necesidades de los
alumnos y docentes.
Incluso el propio volante deja
traslucir, sin embargo, que la decisión fue tomada por la supervisión y luego
propuesta en jornadas en la escuela, donde se expresaron diferencias con la
propuesta. Es lógico, porque el cierre de un turno genera un traslado
arbitrario de docentes y estudiantes, que para peor tuvieron que cursar todo el
año amontonados y con instalaciones edilicias insuficientes en el turno diurno.
Si la denuncia no fue mayor, es porque la baja matrícula evidencia un largo
proceso de vaciamiento del turno.
Pero lo que llama la atención es
que este material fue difundido junto a otro ataque a Ademys, por denunciar el
retiro de los asistentes celadores de la Especial 5. Este retiro y los traslados habría
sido también “consensuado”, sostienen coordinadores de asistentes celadores
electos a dedo.
Este presunto consenso se lleva
adelante en base a presiones laborales sobre los compañeros y la comunidad
educativa, a la cual se le presenta el ajuste como un hecho consumado. Si
hubiera consenso en abrir un nuevo turno o designar nuevos asistentes celadores
¿el Gobierno lo abriría?
¿Y si se quisieran inscribir
nuevos estudiantes el año próximo en el turno noche, el turno volverá a
abrirse?
La fachada y el ataque a Ademys
encubre un consenso que sí está en pie: el del Gobierno de Macri y la Celeste de UTE, que desde la Junta de Especial y el
sindicato acompaña todas las medidas destructivas contra la educación especial,
sus docentes y estudiantes.
El ataque a Ademys se explica
porque, en las elecciones de Junta, fue electa una vocal de Ademys, en un área
que siempre fue para la burocracia celeste un coto cerrado de colaboración con
los sucesivos Gobiernos. El triunfo de Ademys obteniendo una vocal de especial
abrió una brecha en el dominio de la burocracia de los cargos, los traslados y
las designaciones.
Llamamos a defender la educación
especial contra el ajuste, a organizar escuela por escuela, y a poner las cosas
en su lugar: las “mentiras” de las que nos acusan son una fachada para encubrir
una política de ajuste.
• No al cierre del turno vespertino de la escuela especial 4
y centes 2;
• Construcción d escuelas especiales;
• Ninguna reubicación d asistentes celadores;
• Elección por concurso de los cargos de coordinadores de
celadores. No a los cargos a dedo;
• Reglamentación del cargo d ACDM resuelto en asambleas y
plenarios por los compañeros celadores;
Tribuna Docente
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